Llamamos elásticos intermaxilares a las pequeñas gomas elásticas utilizadas en los distintos tratamientos de ortodoncia para corregir problemas de mordida y alinear los dientes superiores e inferiores.
¿Has oído hablar alguna vez de estas gomas intermaxilares? ¿Sabes para qué se utilizan? En este artículo te lo explicamos en profundidad para que puedas entender mejor cómo contribuyen a encajar la oclusión y mejorar la posición de tu mandíbula.
¿Qué son los elásticos intermaxilares y para qué sirven?
Los elásticos intermaxilares son pequeñas gomas de látex (u otros materiales hipoalergénicos) que se enganchan entre los brackets o los alineadores transparentes de los dientes superiores e inferiores. Su función principal es ejercer una presión controlada sobre la mandíbula y los dientes maxilares, permitiendo alinear la mordida y corregir problemas como la oclusión dental.
¿Para qué sirven concretamente? Estas son las funciones más importantes de estas gomas intermaxilares:
- Corregir maloclusiones, como la clase II, la clase III, la mordida abierta y la mordida cruzada, o desviaciones de la arcada dental.
- Mejorar la posición de la mandíbula y la relación entre el maxilar superior y la mandíbula inferior.
- Facilitar el movimiento de los dientes para conseguir una alineación perfecta.
Su uso es especialmente relevante en casos de ortodoncia fija, es decir, con brackets y ortodoncia invisible (Invisalign), en los que el éxito del tratamiento depende en buena medida de la constancia y la correcta colocación de estas gomas por parte del paciente.
Tipos de elásticos intermaxilares
No todas las gomas intermaxilares son iguales. Su tamaño, fuerza y colocación varían según las necesidades de cada paciente y del tipo de tratamiento de ortodoncia en cuestión.
Según la función de cada elástico intermaxilar, distinguimos entre:
- Clase I. Este tipo de elástico sirve para cerrar espacios entre los dientes y alinear la arcada.
- Clase II. Se utilizan para adelantar la mandíbula inferior en casos en los que el maxilar superior está por delante.
- Clase III. Ayudan a retrasar la mandíbula inferior cuando está más adelantada que el maxilar superior.
¿Cómo se colocan los elásticos intermaxilares?
Colocar los elásticos intermaxilares no tiene ninguna dificultad y, en cualquier caso, tu ortodoncista te explicará al detalle cómo y cuándo debes hacerlo. Verás que es muy sencillo, pero requiere atención y constancia.
Lo habitual es que solo tengas que quitártelos para comer y cepillarte los dientes, así evitarás que se rompan o se acumulen bacterias. Deberás cambiarlos a diario y, por si acaso, ¡procura llevar siempre nuevas gomas de repuesto encima!
¿Por qué hay que ser constante con los elásticos intermaxilares?
No nos cansamos de repetirlo: la clave del éxito en un tratamiento de ortodoncia con elásticos intermaxilares es la constancia. Si no los utilizas cuando debes, el proceso puede ser mucho más largo de lo que esperabas, e incluso podría llegar a revertirse.
Cada paciente es único, y el tiempo necesario para corregir su oclusión dependerá tanto de la situación inicial como de su esfuerzo con respecto al tratamiento.
Así que, si quieres obtener los mejores resultados y disfrutar de los múltiples beneficios de los elásticos intermaxilares, sigue siempre las indicaciones de tu ortodoncista.
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